Actualmente la crecida demanda en aires acondicionas ha obligado a los fabricantes a desenvolver ideas y materializarlas en nuevas propuestas y conceptos de sistema de calefacción, esto ha sucedido trazo por trazo que con la ideología de mantener el término de enfriamiento, se han creado distintas clases de aires acondicionados que el mercado recibe con los abrazos bien abiertos, ya que esto permite no sólo competitiva, sino alternativas para el consumidor.
Distinguimos entre 5 tipos de aire acondicionado
A modo de texto informativo indicaremos quienes son las 5 clases de aire acondicionado para el hogar, así como también describiremos sus funciones principales y precio aproximado.
De ventana: Llamado como de la vieja escuela, el aire acondicionado de venta tuvo sus tiempos de prestigio hasta que lo bajaron de la nube la serie de modelos que más tarde comentaremos. Su diseño se caracteriza por ser cuadrado, un tanto incómodo para la instalación y son ruidosos, pero si le vemos la parte positiva: fácil instalación, mantenimiento y económico.
Split: Desbancando a los de ventana, llega el tipo split de pared. Estos han sido comunes verlos en 8 de cada 10 hogares, y es que la estética elegante, su escaso ruido y fácil mantenimiento han sido puntos de influencia para que las familias lo adquiera sin duda alguna. Desde 470 euros.
Split de techo: Igual que el anterior, el split en este caso de techo ofrece lo mismo, las únicas diferencias son que es altamente ruidoso y la instalación no es nada barata.
Portátil: Llévalo contigo a cualquier lugar; esta es la filosofía del aire acondicionado compacto. Las ruedas adheridas a la base permitan transportarlo de lado a lado y en lo que respecta el sistema, no requiere instalación, no resultan al cien potentes y el precio es bastante elevado. Desde 300 euros.
Compacto: Utiliza la misma idea del split, pero en el tema de la instalación viene lo complicado. Entre sus ventajas están: fácil mantenimiento y ofrece gran capacidad para un hogar amplio. Lo malo sucede en la instalación, la cual resulta cara y se necesitan materiales adicionales para su correcto funcionamiento. Desde 680 euros.